El torneo intermunicipal de beisbol “Jesús Pérez García” llegó a su etapa de postemporada y en la serie semifinal celebrada el 1 de junio en el parque “Gilberto Garza”, los Nenes y Vaqueros eliminaron a Cachorros de Bustamante y Yaquis de Sonora respectivamente.
El torneo intermunicipal de beisbol “Jesús Pérez García” llegó a su etapa de postemporada y en la serie semifinal celebrada el 1 de junio en el parque “Gilberto Garza”, los Nenes y Vaqueros eliminaron a Cachorros de Bustamante y Yaquis de Sonora respectivamente.
Los actuales campeones perdieron la oportunidad de conservar el trono en las últimas entradas al permitir 9 carreras y Julio C. Treviño y Bernabé Solís jonronearon.
Los del Ejido Ranas, Lampazos de Naranjo, Nuevo León, registraron la de la quiniela en la primera entrada con oportuno de Heriberto Treviño; los Yaquis igualaron el marcador con estacazo de 4 esquinas solitario de Óscar Jaime Serrano.
Ya en la quinta ronda, los visitantes armaron su ataque iniciándolo con 3; con 4 en la sexta; agregando 2 en la séptima y otro par en la octava para concluir 12 carreras a 2, alzándose con el triunfo Efraín Treviño.
Jesús “El Jesse” Martínez inició el desfile de lanzadores, le siguió Juan Ángel Serrano, después Gerardo Rodríguez y concluyó Eulogio Serna, aceptando entre todos 17 indiscutibles, según la anotación oficial de Óscar “El Güero” Hernández.
En el segundo desafío, los Cachorros de Bustamante fueron superados por los Nenes por cartones de 9 carreras a 5.
Juan Pablo Rodríguez aceptó las 5 carreras en 7 entradas completas, se agenció el triunfo, sacando el resto Santos Rodríguez.
Rodrigo Chapa, después de aportar a la causa de los Nenes un jonrón de dos carreras en la cuarta entrada, salió del juego lesionado después de conectar un doblete; hablando de lesiones y bajas muy importantes, también Ricardo Montemayor fue sustituido por Alberto Martínez, esperando se recuperen y aporten su potencial en la serie que se avecina por el trono.
Roberto Rodríguez subió al montículo por los Cachorros, recibiendo del segunda base un cuadrangular, cargando, de paso, con la derrota.
