Por 12 carreras a 4, los Yaquis vencieron a los Tiburones para conservar lo invicto en el torneo de béisbol “Profr. Benito López Valadez”.
Cuando los aficionados todavía no tomaban su lugar en el parque Gilberto Garza, el domingo 22 de abril el receptor y primer bat de los escualos Iván Buentello Contreras recibía la felicitación de sus compañeros por haber impactado la esférica y mandarla detrás de la barda.
Poco duró el gusto porque en la segunda mitad del mismo primer acto la tribu de Miguel Serrano anotó en 3 ocasiones sin ocasiones sin conectar de hit (2 pasaportes y par de errores) y en la segunda se definió al ligar 6 imparables, un pasbol, un wildpitch, una estafa y dos pifias arrojando un resultado de 5 carreras para sumar 8.
Los Tiburones se defendieron inclusive en la tercera ronda Antonio Escamilla se voló la barda llevándose por delante al jovencito Luis Carlos García quién se fajó en el campo corto.
La victoria se la agenció el serpentinero derecho Oscar Jaime Serrano Román y Juan A. García Cruz tiró por el plantel dirigido por su padre Juan Roberto García Fuentes.
En el segundo partido más disputado y hasta con jugadas polémicas, cuestionadas por los seguidores del equipo derrotado al umpire Mario Escobedo, por supuesto, sin perder la compostura, los Cerveceros salieron airosos ante los Vaqueros de Ranas, Lampazos N.L.
La pizarra final 9 carreras a 6, acreditándose la victoria Santos Rodríguez con salvamento del veterano de mil batallas Abraham Villarreal en la octava entrada y a base de su experiencia abanicó a 2 y cerró el noveno capítulo en orden.
El mismo día pero en Bustamante los Cachorros de aquel lugar superaron a los Piratas de Vallecillo N.L. por cartones de 14 anotaciones a 3 lanzando por los locales Roberto Rodríguez que según el reporte del buen amigo Artemio Hernández fue castigado con un jonrón de dos carreras en el inning inicial de Pablo Buentello.
En total se enfrentó a 29 bateadores en 7 entradas pactadas, aceptó 6 hits, no otorgó transferencias, no cometió wild pitch, su cuadro le cometió un pecado y dejó abanicando la brisa a 7; el tropiezo lo sufrió el veterano Adelaido “El Rayo” Herrera.
