Desde que tengo uso de razón he escuchado que el que colecciona se apasiona, así sea amores fáciles o palabras difíciles, cajetillas de algún producto, automóviles, programas impresos anunciando corridas de toros y funciones de box; minucias que con el tiempo alcanzan un valor incalculable al convertirse en obras de arte.
Pero quién aviva el corazón, agita el cerebro, limpia la mente trasportándola hacia horizontes luminosos o momentos nostálgicos, aguzando la vista tornando los píes ágiles al instante en pos de un tesoro. no cualquiera.
El maestro, filósofo, compañero de la Asociación de Escritores de Sabinas Hidalgo N.L. y extraordinario amigo, Profr. Salvador Garza Inocencio, lo logró el miércoles 23 de febrero. honrándonos con su presencia y el privilegio de obtener para nuestra colección de autores locales su cuarto libro y primero sobre personajes del pueblo.
Más de 100 personas inmortalizadas con su pluma que van desde el añorado cronista de la ciudad Profr. Celso Garza Guajardo y el actual Profr. Santos Noé Rodríguez Garza, hasta quién grabó para siempre su nombre con su obra musical “Morenita Mía”, Don Armando Villarreal Lozano; pasando por la inigualable dama de virtudes excelsas Doña Josefina Valadez Guerra de Mascareñas; el filantropo Manuel M.García; el noble amigo Juanito Moreno, o glorias del deporte como Miguel González López, Profr. Víctor Alejando Mendez o Profr. Benito López Valadez.
Nunca debió faltar su padre Don Salvador Garza Garza, hombre calmado, sereno lleno de bondad y conocimientos de la vida a quien el Gran Arquitecto del Universo nos permitió conocer y tratar en sus labores cotidianas.
En el quinto párrafo de la pagina 31 se puede leer “Hoy aún resuenan en nuestros oídos tus palabras, como la última vez, cuando decías “que la grandeza del hombre es por su sencillez” y que “el hombre es por lo que da y no por lo que recibe”; más de cuarenta años laboraste frente a ese molino de nixtamal; allí te conocieron miles de gentes que hoy son hombres y mujeres de bien y cuando los niños te gritaban: “Chava” “échame la mía”; “éste acaba de llegar”, y “yo llegué primero.”.
Para los que no vivieron esa época les aclaro que las anteriores expresiones se daban no porque estuviera flojeando como se acostumbra ahora en algunos lugares, la prisa era porque te mandaban al molino después de la salida de clases de la mañana, todavía había que caminar varias cuadras para llegar a casa, que nuestra madre elaborara las tortillas, comer y regresar a tiempo la escuela en la tarde.
En fin, una obra donde refleja su origen con evocación a la gente del Sabinas Hidalgo N.L. de ayer sin hacer a un lado la de hoy llevando a la practica las inmortales palabras de un personaje que nació en La Habana un 28 de enero de 1853 en el seno de una modesta familia española radicada en Cuba, me refiero al pensador político, filosofo y poeta, nada menos que el libertador José Julián Martí y Pérez (José Martí): “Honrar Honra”.
