El redoblar de un tambor fúnebre abría el camino y daba paso a la escenificación de la Pasión de Cristo en el viacrucis celebrado el viernes 6 de abril en nuestro municipio, donde varios centenares de sabinenses formaron parte activa de este Calvario que tuvo un recorrido de 2 horas.
Puntuales, a las 9 de la mañana, el contingente de feligreses partió frente a la Parroquia de San José, con la escenificación que ahora tuvo la novedad de un joven que interpretó el papel de Cristo con su corona de espinas.
El cielo estaba nublado, el Viernes Santo tuvo esta ruta del calvario en dicha representación, que en nuestro particular punto de vista fue el más importante de los últimos años, ya que los mismos ciudadanos que acompañaron las diferentes estaciones que comprende ese Sendero de Dolor que ha marcado a la humanidad por más de 2000 años, cargaron la Cruz.
El joven Cristo tomó la cruz en la segunda estación, pero en la tercera, en el cruce de las calles Manuel M. García y Porfirio Díaz, empezó uno de los momentos más emotivos de toda esa jornada que fue una Renovación de la Esperanza de la comunidad sabinense que se dio cita.
Ya que tras recibir la cruz con la fotografía de Cristo, los varones que así lo hicieron respondieron al llamado de cargar la pesada cruz de madera que trasladaron gustosos por toda esa ruta hacia el calvario por espacio de una estación.
Ya que enseguida se invitó a las amas de casa, luego a las señoritas, a los jóvenes, a aquellas mujeres que así lo desearon y a aquellos que gustaran cargar la cruz, por lo que en la estación 11, el joven Cristo cargó la Cruz de Madera la cual trasladó hasta la Ermita, donde se hizo la Crucifixión.
Las escalinatas de la Ermita fueron el escenario, como cada año, de la Muerte de Cristo, donde cabe apuntar, miles de personas se congregaron.
Ya que en cada paso del Viacrucis, personas se integraban al contingente, apuntando que en la parte final del trayecto, amas de casa salieron de su hogar para brindar agua a todos los que así lo desearan.
En lo personal nos tocó cargar esa cruz de madera, junto a otros padres de familia, pero nos dejó impactados como las mujeres sabinenses formaron parte de esa Ruta del Calvario. Unidas, cargadas con la Fuerza de la Fe se brindaron en apoyar a Cristo en ese momento que terminó a las 11:20 de la mañana, cuando ya muerto en la Cruz, Cristo fue retirado y con ello el final del proceso y la gente se retiró del paraje donde muchos estaban pasmados por ese Calvario que vivieron en carne propia los sabinenses.
Fue gratificante ver como todos se integraron y formaron parte de esta celebración que por primera vez tuvo estos matices de participación ciudadana de manera activa, para mas tarde seguir con las actividades propias de esta Semana Santa.
La Reflexión es la mejor idea por adoptar en estas fechas, ya que nuestra vida debe cambiar algunos rumbos equivocados que hemos tomado, pero con al Fuerza de la Fe en Cristo, todo es sencillamente posible.
