A diferencia de las carretas, los carretones eran un medio de transporte más rápido, también un par de ruedas más livianas y eran tirados por un caballo o una bestia mular.
A diferencia de las carretas, los carretones eran un medio de transporte más rápido, también un par de ruedas más livianas y eran tirados por un caballo o una bestia mular. Con ellos se desarrollaba un trabajo menos rudo que con las carretas; los carretones eran utilizados para el acarreo de frutas o el traslado de enseres domésticos de un lugar a otro, lo que hoy bien pudiéramos llamar una agencia de mudanzas. Por este medio de transporte también llegaban al pueblo muchas personas que venían de las rancherías aledañas a surtir la despensa para la semana o la quincena según fuese el caso.
Tenían un lugar específico para estacionarse, y lo hacían allí por la calle Dr. Coss en su cruzamiento con la calle Porfirio Díaz, allí en contra esquina de la popular tienda de Don Gorgonio Ruiz; allí estaba el sitio de los carretones. Los hombres que trabajaban en esta actividad contribuyeron en gran forma también al progreso del pueblo en esa época, hoy recordamos a Eduardo Lozano, Antonio Gutiérrez, Anastasio de León, Santos de León, Armando Robles Martínez.