Escuchábamos detenidamente las voces de tres distinguidos eruditos en la palabra. Tres hombres que por su sapiencia han obtenido cada uno de ellos el Premio Nóbel de Literatura.
Resulta interesante concluir que la palabra siendo voz y sonido, equivale también en ocasiones a la meditación y al silencio.
Reunidos todos ellos con el ánimo de analizar la palabra, la voz y la lengua hispana; y su relación con la comunicación y sus medios de transmisión.
Resulta interesante saber que aún hay gente que se preocupa por el idioma, gente que desea mejorar el conocimiento, porque mejor aprendizaje es dar cuenta con la propia palabra lo que se afirma.
Hablar de cultura no es hablar de altos niveles intelectuales, no todos los pueblos alcanzan la cumbre. ¡A propósito de palabras! hay algunas que dirigen, otras enseñan, aquellas inician, éstas profesan, esas documentan, algunas perfeccionan, otras elevan; sin embargo hay algunas otras que afectan, que seducen, que corrompen y que envician.
Los medios de comunicación hay tienen un vertiginoso avance. Hemos pasado del mimeógrafo a la copiadora; del teléfono al fax; de los bulbos a los transistores, a los chips y microchips; a los conductores de fibras ópticas, a los rayos láser, a la señal de satélite.
Mas no por ello olvidemos el origen de la comunicación, que es y ha sido "la palabra". Al andar se hace camino, y al mirar hacia el origen, lo habremos de perfeccionar.
Pero así está el mundo y éstas son "Nuestras Cosas".
Hasta la próxima.
