Hay en la colonia “Francisco Villa” ubicada al norte de nuestro pueblo un molino donde aun se usa el “nixtamal” y en una visita a ese lugar pudimos observar incrustadas en la banqueta muchas “piedras” usadas, que en algún tiempo sirvieron para moler nixtamal.
Varios fueron los lugares ocupados por los molinos de nixtamal, de los que solo queda el recuerdo: uno por la calle Lerdo de Tejada, otro por la calle Cuauhtémoc pasando por Carretera Nacional, otro por la calle Juárez antes de llegar a Zaragoza, otro más por la calle Bravo entre Iturbide y Escobedo.
Eran los molinos de nixtamal, los lugares a los que muy de mañana llegaban las amas de casa o los niños antes de irse a la escuela.
Hoy las noticias, ayer los “chismes” eran conocidos muy de mañana; de ahí, que muchos digan hoy ¿quién te lo dijo? y la respuesta sea “me lo contaron en el molino”.
Los molineros de aquella época eran: Pablo, Rosendo y Severo González Valle, Salvador Garza Garza, José González, Mauro González y tal vez algunos más que hoy escapan a nuestra memoria.
Los molinos se fueron, la tecnología acabó con ellos, pero el recuerdo es perenne cuando pasa de generación en generación.
Pero así está el mundo y éstas son “Nuestras Cosas”.
Hasta la próxima.