Escribir o hablar del maestro Mascareñas es referirse con propiedad a un hombre honesto, humilde, franco, virtuoso; dotado además de una clara inteligencia, atributos que siempre los puso en práctica y los sigue ejercitando con amplia dedicación y sublime vocación al servicio del magisterio y del periodismo regional.
Lo recuerdo con cariño como mi excelente maestro de Biología en el primer grado de segunda enseñanza en la Escuela Secundaria "Profr. Antonio Solís" allá pór el ciclo escolar 1959-1960; sus clases eran un verdadero deleite, maestro estudiado y bien preparado sobre los temas a tratar en el aula.
De él, aprendí la forma de hacer las variaciones de voz, a veces muy baja apenas perceptible al oído, para cambiarla súbitamente al tono alto y de pronto al tono medio, de tal forma que sus alumnos nos manteníamos atentos a sus actuaciones magistrales; sirviéndome esta característica para aplicarla en la enseñanza desde que me inicié en el magisterio.
De la vida y obra del Profr. Jorge, se pueden escribir infinidad de páginas, es una personalidad muy apreciada y estimada por quienes tuvimos el privilegio de ser sus alumnos, recordándolo no solo por sus amplios conocimientos académicos y su cultura general, sino también por su extraordinario sentido del humor que aún conserva a su bien vividos ochenta y cinco años, resultando muy agradable platicar con él, pues cuando menos se espera, lanza una interesante e ilustrativa anécdota impregnada de un claro mensaje o un chascarrido para alegrar el ambiente de quienes en ese momento lo rodean.
En los años mozos de su juventud, fui testigo de sus grandes hazañas deportivas. Sucede que a fines de los años cincuenta e inicios de los sesenta, con frecuencia acudía todos los domingos como fanático al campo de beisbol "Gilberto Garza" de la colonia Bellavista, allí veía al Profr. Jorge en su faceta de besibolista, luciendo en forma impecable su uniforme, desempeñándose como un efectivo pitcher, además de otras posiciones en el cuadro, era todo un espectáculo verlo actuar al lado de sus compañeros de equipo de aquellos tiempos idos, quienes lo estimaban y apreciaban como maestro, deportista y manager. Entre esos compañeros que lo acompañaron y que dejaron gratos recuerdos entre los sabinenses podemos recordar al Sr. Aléctor Ruiz Cavazos que jugaba la primera base, a Porfirio "Pili" Cervantes y a su hermano Barbarito Cervantes, Antonio García el famoso "Penny" que jugaba la posición de catcher, Profr. Miguel Salinas Flores (pitcher), José "Pepe" Mercado, Romeo Ayala (pitcher), Mario Ibarra Sánchez (Jardinero y campeón jonronero),Jesús Lozano "La Cota" (jardinero),Juan Hernández, Irineo Santos (catcher), Jesús Pérez García, el famoso "Canales", que fue también un gran jonronero y que jugaba la primera base y quien no recuerda al Sr. Fernando González Garza "La Pulga" recorriendo con maestría los jardines a pesar de su corpulencia; Isidro Pérez García, hermano mayor de "La dinastía de los Canales", Arturo Ibarra (pitcher), Juan Manuel García, productor de muchos jonrones; Julio Pereyra (pitcher), Profr. Francisco Guadiana (pitcher),Luis Treviño, el innigualable "Doble"; Federico "Quique" Villarreal (Short stop), Dr. Luis Lauro Ayala (pitcher), Remigio Arrambide Martínez "Reme", Profr. Rubén Solís, Profr. Casimiro Tijerina (catcher); Profr. Dante F. Perrone Hernández (catcher), Alfonso Buentello, Antonio Ramírez (pitcher y lanzador de un juego perfecto), su hermano "Lalo" Ramírez; Jesús González "El chino", Profr, Abraham Villarreal Cervantes, José Manuel Villarreal "El Pigui" quien su ídolo fue siempre el Profr. Mascareñas a quien incluso imitaba en su manera de caminar y hablar. También hubo muchos otros beisbolista, igual de valiosos que escapan a mi memoria, que también fueron compañeros del maestro Mascareñas en sus aventuras como jugador de beisbol.
Profr. Otoniel Arrambide Villarreal
Miembro de la Asociación de Escritores de Sabinas Hidalgo