Eran unos idealistas, personajes bien plantados que sabían imponer disciplina solo con ponerse frente al grupo, grababan sus enseñanzas con cincel de escultor; en primer año enseñaban a leer, escribir y hacer cuentas: cuatro alfabetos, mayúsculo y minúsculo de cursiva y ambos de letra impresa; además las tablas de multiplicar del 2 y el 3 y a veces hasta la del 4, a sumar, restar y dividir; canto y educación física.
En segundo a leer de corridita, y en redacción hacer recados; el resto de las tablas de multiplicar hasta la del doce, dividían, sumaban y restaban, conocían las principales líneas y figuras geométricas; de ciencias naturales plantas y animales; y de historia las celebraciones mas importantes; marchaban y jugaban rondas y demás.
En tercer año aprendían la regla de tres simple: directa e inversa, y a veces la regla de tres compuesta, aprendías a sacar áreas de algunas figuras geométricas; se iniciaban en las reglas ortográficas; conocían la ubicación y los datos geopolíticos de su municipio; se iniciaban en la historia de las tribus originales de su país; en ciencias naturales empezaban el conocimiento de los aparatos del cuerpo humano; tenían deportes y disciplina militar.
En cuarto grado empezaban a manejar los quebrados y a sacar áreas y volúmenes de las figuras y de los cuerpos geométricos; hacían lectura comprensiva y redactaban cartas; en geografía conocían la división política del país con datos precisos de cada estado y la historia patria; en civismo iniciaban el conocimiento de los deberes y derechos de todo ciudadano en sociedad; en ciencias naturales manejaban la organización y cultivo de las plantas y en anatomía iniciaban el conocimiento del cuerpo humano; había descripción de estampas y canto, así como deportes y educación física y hacían manualidades.
En quinto año leían en silencio y en voz alta, redactaban cartas y algunos trabajos de improvisación, conocían todas las reglas ortográficas; en matemáticas manejaban la regla de tres compuesta y los quebrados en todo tipo de operaciones y en geometría sacaban áreas y volúmenes; en geografía conocían la distribución política de las Américas y la ubicación de cada país con sus orografía e hidrografía y medios de vida; conocían la historia y los personajes importantes; analizaban el cuerpo humano y el funcionamiento de cada órgano; dibujaban, cantaban y hacían ejercicios físicos y también manualidades.
En sexto año reafirmaban todo lo aprendido en los años anteriores además en matemáticas se enseñaban a sacar raíz cuadrada, en geometría áreas de terrenos, a calcular alturas y aplicar el teorema de Pitágoras, manejaban los números romanos; conocían la historia universal y la geografía del planeta; conocían el funcionamiento del cuerpo humano y mencionaban los nombres de cada uno de los huesos; en gramática aprendían redacción y verificaban todo lo aprendido; practicaban deportes y entonaban cantos a coro, practicaban la instrucción militar y hacían manualidades.
Todo ello enseñado con pasión sin importar horarios ya que se trabaja de mañana y tarde, el salario era poco apenas para vivir, no había prestaciones y además había que hacer horas extras organizando actividades para sacar fondos para arreglar los bancos, pizarrones y la escuela. Con el tiempo los sabios de la educación dijeron que tanto conocimiento era enajenante, y todo lo trasformaron; en la actualidad un niño o una persona equis, si no tiene la calculadora en la mano no resuelve una operación que antaño lo hacían sin dificultad.
Hoy le rendimos homenaje a los Maestros de antaño, aquellos que anteponían su deber a las tentaciones de la holganza; llámense reuniones de colegio, asambleas informativas o actividades complementarias; para ellos solamente existía el alumno y el satisfacer su ansía de saber. Descansen en paz los ya idos y larga vida para los que aún existen.
SANTOS NOÉ