Dijo el Profr. Víctor Alejandro Méndez a Simón Cervantes y a Benito López:
-Allá los espero en el Tec, mañana a las 6 de la tarde.
Al siguiente día, 30 de abril de 1958, se iba a efectuar el Campeonato Estatal de Atletismo, que era selectivo para asistir al Campeonato Nacional que se efectuaría en Ciudad Victoria, Tamaulipas, en el próximo mes de mayo.
Al día siguiente (30) Simón y Benito partieron a Monterrey y tomaron un camión urbano y cuando andaban por la Villa de Guadalupe, más o menos, Benito preguntó al operador:
– ¿No pasa por el Tec?
– ¡No! Fue la tajante respuesta.
Se bajaron y le entraron a pie y en una hora, llegaban al Estadio, ya se oía, que se preparaban los competidores de 1500 metros planos (Simón) y de salto de longitud (Benito).
Veían Simón y Benito, cuando iban llegando que el Profr. Víctor los buscaba con bastante ansiedad. Se plantan ante él y les dice:
– ¡Calienten!, ya están anunciando sus pruebas.
– ¿Qué calienten, ni que calienten!, le dijo Benito:
– ¡Si nos venimos quemando!-, no ve que nos perdimos y tenemos como una hora de venir caminando.
Acto seguido se fue cada uno a su prueba como si nada hubiera pasado. (E hicieron muy buenas marcas).