Una vez fique el Consejo Político Nacional del PRI autorizó realizar una elección abierta a militantes y simpatizantes de su candidato a la Presidencia de la República, tanto Enrique Peña Nieto como Manlio Fabio Beltrones están listos para ir en pos de la ansiada nominación, aunque, salvo algún hecho imprevisto o un milagro, desde ahora se augura una victoria del ex Gobernador mexiquense.
Ante la presunción de la guerra sucia, que se espera sea el signo distintivo de las campañas del año próximo, Peña Nieto aseguró que el PRI se centrará en ganarse la confianza de la gente.
“Estamos preparados para ganarnos la confianza de la ciudadanía, para llevar una oferta realmente con- fiable que entusiasme al pueblo de México, que despierte ánimos, que renueve esperanza".
Esto, en realidad, no sería nada nuevo, pues cada trienio o cada sexenio, según sea el caso, se renueva la esperanza de la ciudadanía, que siempre está a la espera y anhelando tiempos mejores que signifiquen un auténtico cambio a favor o en beneficio de la gran mayoría y no sólo de unos cuantos.
Además, cabe señalar que durante el evento en cuestión, los tricolores ahí reunidos coincidieron en la necesidad de mantener la unidad para llegar fuertes y con posibilidad de triunfo a la elección constitucional de julio del 2012.
Por su propio bien, y el de su partido, veremos si los priístas son capaces de mantener la unidad, pues con tantas candidaturas en juego y con las pugnas internas, que se recrudecen en vísperas de las designaciones, no les será tan simple lograr que ello no quede en buenos deseos.
Castellanos
Miembro de la Asociación de Escritores de Sabinas Hidalgo