El Coro Celestial está de pláceme, ha llegado para reforzar la pureza de su canto, un ángel, que ha ascendido desde el planeta Tierra; donde vivió consagrado a su familia, haciendo el bien y tendiéndole la mano a todo aquel que de sus servicios necesitara.
El Coro Celestial está de pláceme, ha llegado para reforzar la pureza de su canto, un ángel que ha ascendido desde el planeta Tierra; donde vivió consagrado a su familia, haciendo el bien y tendiéndole la mano a todo aquel que de sus servicios necesitara.
Al igual que su esposo fue amable y bondadosa y junto a un grupo de Damas distinguidas; hacía agradable los ritos religiosos entonando canciones llenas de evocaciones divinas, que permitían a las almas atormentadas encontrar el camino de la fe.
Formó con su esposo una hermosa familia, que da testimonio de los valores morales que fortalecen su carácter y su manera de ser.
Muy pronto se fue a hacerle compañía, al que por tantos años le brindó sus esfuerzos, sus caricias y su amor; tal vez sintió, que su misión en la vida ya estaba terminada y se fue a buscar la luz divina que ya iluminaba a su amigo de siempre.
Gratos recuerdos, y momentos sublimes nos dejan: compañeros del camino, que en vida nos dieron su amor y amistad.
Seguro estoy, que el Divino Hacedor, los premia con su presencia y sus descendientes vivirán confiados en que sus padres y abuelos cumplieron con su misión.
Descansen en paz amigos entrañables.